FotoReinvenciones / DE LA TERNURA AL DRAMA

Cada cierto tiempo a todas las personas nos sucede que nos sentimos impulsadas a realizar algo a lo que yo llamo una “limpieza de vida”. Bien sea porque sentimos que hemos finalizado una etapa, porque necesitamos espacio o porque nos mudamos, nos ponemos durante un tiempo que se nos pasa volando a borrar teléfonos, librarnos de cosas que estamos muy seguros de que ya no vamos a usar o a descargar el armario de ropa que ha dejado de interesarnos.
Hace unos días a mí me ocurrió justo eso: sentí el impulso irrefrenable de deshacerme de numerosas y variopintas posesiones que han perdido por completo el sentido y el espacio en mi existencia; entre ellas, aunque me dé un poco de vergüenza admitirlo, todavía se encontraba una viejísima y olvidada ovejita de peluche que llevaba conmigo a todas partes cuando tenía unos cuatro años. Me quedé muy sorprendida porque estaba convencida de que me había deshecho de ella hace mil años, pero resultó que no, que continuaba ahí metida en una bolsa de plástico dentro del armario empotrado. La verdad es que me enfadé un poco al encontrarla y la aparté de malas maneras haciéndola aterrizar encima de la cama. No fue hasta un par de horas después, habiendo terminado de despejar el armario, cuando me di cuenta del aire tan dramático que había tomado la pobre ovejita y de lo divertido que me parecía que un viejo ser inanimado e inservible hubiera parecido cobrar vida o muerte (según se mire).
 

Si de vez en cuando os paseáis por alguna feria de Arte, os habréis dado cuenta de que las reinvenciones más impensables son ya todo un clásico ideado, explotado y mostrado por los creadores contemporáneos. Así pues, aunque yo no soy artista pero me gusta jugar a serlo por mera diversión y entretenimiento, una chispa se me encendió al observar y toquetear el peluche, y las conexiones se establecieron en mi cabecita dando como resultado muchas risas y unas cuantas fotos de las que he seleccionado estas tres en base a lo que me sugirieron al mirarlas. Nadie me negará que la pobre tiene un aire bastante conmovedor.


 

 Si tras observar estas imágenes alguien dijese -Puufff... he visto cosas peores en Arco...-,
le diría que Yo también, jajajajajajajaja 😆😄😂